martes, 23 de febrero de 2010

Comunicado oficial.

Sirva esta entrada para dejar constancia de mi retirada definitiva del mundo de las motos. Ha sido una carrera corta que se resume en 5 caídas en un par de meses de grandes premios, ni el mismísimo Sete iguala mi palmarés!!!! Mi equipo de mecánicos (los de la tienda india) se congratulan de mi abandono al ser descargados de casi todo su trabajo. A toda mi legión de fans, que tan fervientemente han seguido mi corta carrera, sólo que me queda agradecerles su apoyo. Lamento no haber podido dedicaros esa victoria (día sin caerme) que tanto ansiaba. A partir de ahora sólo queda confiar en que Lorenzo, Pedrosa y compañía puedan paliar con sus victorias el vacío que para el motociclismo supone mi retirada. En mi memoria quedarán siempre aquellos momentos de gloria (los tres días que tarde en caerme por primera vez), en los que sentía que una gran carrera estaba por venir.

Siempre vuestro,

José Luis Cerezo.

jueves, 11 de febrero de 2010

Recapitulando un poco

Tras varias entradas hablando de otros temas, puedo confirmar que por aquí todo sigue más o menos igual. Como en todos lados supongo, la vida se termina convirtiendo en una rutina diaria. Entre semana ya conté como era más o menos esa rutina. Los fines de semana siempre surge algo, aunque no solemos salir de Luanda. Siempre hay alguien que da una fiesta porque se va o llega. Si no nos la buscamos nosotros. También algunas veces bajamos a la zona de Cabo Ledo que es una playa chula a unas dos horas. Aunque Luanda sea una ciudad costera, a la hora de la verdad da un poco igual. Casi toda la costa esta rodeada de los famosos musseques, y el agua está bastante contaminada.

Si echo la vista atrás, y pienso en mis expectativas antes de venir, supongo que las cosas se están dando más o menos como imaginaba. A nivel de trabajo, ya me habían dicho que el papel de los becarios era muy importante y se aprendía bastante, y es cierto, tampoco es que estemos todo el día con el pico y la pala, pero trabajo por hacer todo el que quieras… y hasta ahí puedo leer jaja, aunque podría hablar horas de esta, mi querida oficina.

La ciudad tiene sus sitios chulos, hay bastantes locales para comer o salir que están bastante bien, aunque todo muy caro. Más allá de eso, todo está a medio hacer, la ciudad está en constante crecimiento, lo que se puede ver por la cantidad de edificios y carreteras en construcción. Por otro lado, las zonas de chabolas ahí siguen y no se como lo van a solucionar. Este es el gran problema. El 80% de la población vive en condiciones infra-humanas, en zonas en las que no hay agua, ni luz, y totalmente invadidos por la basura, por arroyos inmensos de mierda y lodo atravesando todos y cada uno de los musseques.

El tráfico es mucho peor que lo que pueda alcanzar la imaginación de un tío venido de cualquier primer mundo. Te devora gran parte de la energía. No sólo por tardar tanto en hacer cualquier desplazamiento. Más aún, por la manera de conducir que tienen aquí, no existe la más mínima educación vial, y cada vez que coges el coche terminas estresado.

Otro problema es que al no disponer normalmente de coche, los desplazamientos fuera de Luanda se complican. Además todo está muy lejos, a menos de seis horas de coche poquita cosa. A nivel internacional, pocas conexiones y muy caras. Vamos, que para conocer mundo seguro que hay muchos mejores destinos. Esto no quita para que vaya a exprimir al máximo los destinos por aquí cercanos...

Para expresar lo que supone vivir aquí en Angola y por ende en África, se que todavía me queda mucho. No es fácil transmitir sensaciones. Tampoco es fácil la vida aquí. Para ayudar a entender la realidad africana, recomiendo la lectura de Ébano de Kapuscinski, espectacular libro en el que relata sus experiencias en África donde permaneció como periodista durante varias decadas, con el que, a pesar de no mencionar apenas a Angola, me he sentido identificado a lo largo de todo el libro.

Todavía me queda mucho por vivir aquí. Espero ser capaz de transmitirlo. Abrazos.

lunes, 8 de febrero de 2010

Una gasosa faz favor!!

Sabía que existía. Me habían contado unos cuantos casos. No lo dudaba. De hecho, en alguna ocasión ya la había esquivado haciéndome un poco el tonto. Pero el sábado pasado ya no estuve tan hábil. No tuve más remedio que pagarla.

Estaba llegando a la oficina en moto, cuando 100 metros antes me manda un policía echarme a un lado. Le muestro los papeles de la moto y el pasaporte. Y el carné de conducir? Pues no, ese no lo llevaba. Ahí empieza una conversación absurda en la que él no sabe como decirme que le suelte una gasosa, y yo le suelto diferentes rollos para no pagársela. Me dice que si se cuanto sería la multa. ¿Cuánto? 70000kz (550€). Los dos sabemos que eso no va a pasar. A ninguno nos conviene. Pero claro, el muy cabrón tenía la sartén por el mango. Tenía la tarjeta de propiedad de la moto, y un verdadero motivo para pararme. Tuve que claudicar. Esta vez mis argucias no iban a servir.

-Como podemos arreglar esto, necesito ir a trabajar y no puedo estar aquí todo el día.
-No sé, usted dirá.
-2000kz (15€).
-Da 3000.
-No, no…2000kz está bien.
-Ok, da 2000kz.

Le doy la pasta, me devuelve mi tarjeta y adiós. Así es como funcionan aquí las cosas.