Mi reciente viaje por el sur de África se inició pasando la noche del sábado en un parque nacional al norte de Johannesburgo con Alberto (el becario de informática que compartimos con los bafana bafana) y unos colegas suyos. De ahí partimos el sábado por la mañana, tras el correspondiente safari claro está, dirección a Gaborone, capital de Botswana. Aquí nos encontramos con una ciudad dividida. La parte administrativa con grandes edificios totalmente muerta (era domingo), y otra zona con algo más de vida, aunque como después se convirtió en regla general durante todo el viaje (en las ciudades), nos costó bastante encontrar un sitio para comer que no fuera de comida rápida, maldita herencia del periodo colonial anglosajón.
A la mañana siguiente, y tras perder mis segundas gafas de sol en África (en mi media), partimos con la intención de cruzar el Coto del Kalahari Central, esa mancha verde en el centro del mapa, con nuestro alquilado 4x4, con la idea de dormir en Maun, puerta de entrada al Okavango. Primer contratiempo. Tras ya costarnos llegar a la puerta de entrada, en esta les hizo bastante gracia que pretendiéramos cruzarlo con nuestro mierdo 4x4, sin agua, ni gasolina suficiente. Momento de crisis. Había que volver sobre nuestros pasos y decidir que hacer. La solución fue pegarnos la primera de las palizas de conducción. Tras 14 horas (5am-19pm) llegamos a Maun. Allí pasamos dos noches. La primera de ellas de infausto recuerdo, por el encuentro de los dos siguientes factores: montar la tienda de noche de aquella manera, y el típico diluvio tropical nocturno.
El miércoles por la mañana confirmamos la inutilidad de alquilar un 4x4. Pretendíamos cruzar el Parque nacional del Chobe, pero nuevas indicaciones de que era preciso un tocho 4x4 nos hizo rodearlo. Primero paso por Nata, y de ahí a Kasane, donde pasamos la noche. Antes, por la tarde, visita de rigor al parque. Espectacular. No hay otra manera de definir este entorno, que se encuentra junto al río Zambezi. Vimos bastantes animales, espacialmente elefantes, aunque lo mejor fue cuando, inesperadamente, me encontré dos de ellos de noche jugando con las ramas de los arboles, al otro lado de la valla que separaba nuestra tienda del parque. Estuve allí un rato embobado, tal niño pequeño.
El jueves por la mañana partimos hacía el punto culminante del viaje, las Cataratas Victoria o Vic Falls (Zimbabwe). Allí pasamos 48 horas. Nos quedamos en el Shoestring Backpackers, gracias hermanita por el consejo, que inesperadamente se convirtió en referente de un buen par noches de fiesta. Mucha gente local de Victoria Falls (Sí, la ciudad creada junto a las cataratas se llama como ellas), se desplaza al bar del backpackers, y se creaba allí un ambiente de lo más variopinto. Fue sin duda el momento del viaje en el que más inter-relacionamos con la peña local. A las 12 chapaban el sitio, y nos ibamos a un garito cercano con, aún, cierto choque cultural, pero al menda lo le valía con eso jaja, y terminó ambas noches en otro chiringo a las afueras de la ciudad donde ahí sí, no parecerían estar acostumbrados a ver blanquitos como yo. En cuanto a las cataratas, impresionantes la verdad, aunque al ser época de lluvias no las disfrutamos en todo su esplendor. Cuando nos acercábamos a cualquiera de los puntos cercanos de vista, salías literalmente empapado. El mayor caudal del río, el Zambezi, hace que al caer todo ese caudal, choque y vuelva hacia arriba en forma de lluvia. No problema. Volveré en algún otro momento.
Tras un intento fallido de “subsanar” nuestro problema de exceso de kilometraje (menudo palo nos espera!!!), el sábado por la mañana iniciamos nuestro camino de vuelta haciendo paradas en Bulawayo (Zimbabwe), Makhado (SA) y Pretoria (SA). Tanto en esta última como en Johannesburgo, eran fácilmente palpables una gran inseguridad, siendo pocos los blancos que vimos. No me quiero imaginar pasear de noche por cualquiera de ellas.
El lunes 5 vuelta a casa. Quedan 2 meses y pico para el siguiente viaje. Mientras tanto, seguiremos peleando, aunque ahora ya sí, con una independencia que lo hará todo algo más fácil. Abrazos. Jose.
6 comentarios:
Jo, qué chulas las fotos...pero vaya putada lo del 4x4. No sabía que estaba tan chungo el panorama que necesitábais un gran todoterreno...La cosa es que se ve que lo pasásteis muy bien.Y el shoestring ya sabía yo que íba a dar juego.¿Y el papa frita? ¿no sale en ninguna foto?
Bueno, a seguir manteniéndonos informados. Besotes...
Muy buena estrategia de camuflaje el quedarte en los huesos, quilllooo come mas bueyyy que te estas quedando en el chasis, un abrazo muy fuerte
Jose que tipo de 4x4 alquilaste, un citroen C2 ¿o que? La verdad es que esos países que están visitando parecen peligrosos y somo algo desconfiados y tú estás demostrando que se pude viajar por ellos sin problemas. Espero animarme alguna vez a visitarlos. Un abrazo y hasta pronto.
¿que pasa tio? ni la moto, ni el 4x4, ni las gafas de sol.....te me estas asalvajando tio, me preocupas, en serio. Por cierto, antes habias hablado de las chatis (las menos chungas) ¿como lo llevas? porque curvas tendran mas la carretera de Cerromuriano(cordoba, Spain), pero no salen en ninguna fotillo, y contigo nada de nada, ahora, eso si, Ñus y elefantes para parar trenes.
Otra cosa, los mexicanos...han llegado ya?
jaja aver chavales:
- El Jaume no sale q es muy feo jaja
- En el chasis??? que mas quisiera yo Hector...lo que pasa es que en este viaje todo lo que comía, salía bien rapido de mi jaja
- El 4x4 era un Daihatsu Terios Iñigo...no apto para grandes movidas. Eso espero colega...
- Pepe, este es un blog serio tio, no un "me como 1 y me cuento 20" así q para detalles intimos mejor otros medios...y los mexicanos, según mis últimas noticias andan por el desierto del kalahari, donde no van a encontrar muchas camas, ni de 60, jaja
Un abrazo a todos.
Menudas fotos caballero! las cataratas debían de ser increíbles!!
Que tal va todo? donde te vas dentro de 2 meses y medio?? al mundial??
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